Desde la normalización de los nuevos diseños de carcasa por parte de la Organización Técnica Europea de Neumáticos y Llantas (ETRTO*), la elección de los neumáticos agrícolas se ha hecho más completa y se convierte en determinante para mejorar tu productividad.
Conviene ahora diferenciar entre los neumáticos convencionales conocidos como «con carcasa radial tradicional», los neumáticos con carcasas IF (Improve Fexion) para neumáticos con flexión mejorada y VF (Very Improve Flexion) para neumáticos con flexión muy elevada. Echemos un vistazo a lo que realmente los hace diferentes.
Los neumáticos convencionales son, por ahora, los más utilizados por los concesionarios y en los tractores. Para aprovecharlos al máximo, conviene tomar ciertas precauciones de uso, sobre todo al ajustar la presión. En efecto, una adaptación de la presión de inflado es necesaria en función de la carga por eje, la velocidad y el tipo de trabajo (con o sin esfuerzo de tracción).
En un mismo día, la presión variará varias veces en función del uso: desplazamiento por carretera entre dos parcelas cercanas, desplazamiento durante un periodo de tiempo más largo, trabajo en el campo con un apero remolcado, trabajo sin apero, etc.
* ETRTO significa European Tyre and Rim Technical Organisation. Se trata del organismo de normalización de neumáticos, llantas y cámaras de aire que trabaja para armonizar las normas y facilitar el intercambio de piezas entre ellas.
Con una carcasa tradicional, la presión de inflado debe, por lo tanto, ajustarse con mucha regularidad.
Para evitar esta obligación, la solución de los tractores equipados con un sistema de teleinflado es interesante, aunque sigan siendo poco frecuentes sobre el terreno. Para evitarse los ajustes constantes, los conductores tienden demasiado a menudo a ajustar la presión para la situación más exigente, es decir, la conducción en carretera. Consecuencia directa: un neumático que rara vez trabaja en su configuración ideal y una productividad reducida.
Como sus nombres indican, los neumáticos IF y VF permiten ganar en flexibilidad. Estas nuevas tecnologías también y sobre todo permiten soportar cargas más pesadas. Con la misma presión, un neumático IF soportará un 20% más de carga. El neumático VF, por su parte, soportará un 40% más de carga.
Si bien la tecnología IF ya había permitido reducir considerablemente la presión ejercida, la tecnología VF va aún más lejos. El otro beneficio estrella del VF reside en su polivalencia absoluta: ya no es necesario bajarse del tractor para ajustar la presión según el uso. Esto ahorra una enorme cantidad de tiempo y proporciona un confort de uso sin precedentes.
Desde el exterior, el agricultor no notará ninguna diferencia visual evidente entre los tres neumáticos. La forma será la misma, el número de barras será simplemente distinto según el tamaño. Es más bien en el ensamblaje donde la diferencia queda patente. Los materiales son más elaborados y las zonas sensibles, como los talones, están reforzados. Todo esto se hace para permitir ofrecer un neumático de mayor calidad.
La capacidad de flexión, es decir, la modificación de la trayectoria, es mucho mayor en los neumáticos VF, lo que da lugar a una circunferencia de rodadura ligeramente distinta. La mezcla de tecnologías se aparenta, por lo tanto, un error técnico importante que puede tener graves consecuencias para la seguridad. Sólo podemos aconsejarle que opte por un equipo completo y cuatro neumáticos de la misma gama.
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Esta información tiene como único objetivo dar a conocer los aspectos técnicos y funcionales de los neumáticos agrícolas y su uso. No permite emitir un juicio o una conclusión definitiva sobre un determinado problema. Sólo su experto en neumáticos agrícolas está en condiciones de hacer una evaluación técnica y tomar una decisión final, caso por caso.
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